Fisioterapia pediátrica: ¿Qué es y en qué consiste?
Los niños crecen rápidamente, y a veces las lesiones y enfermedades son inevitables. Otros niños pueden tener o desarrollar afecciones que implican un tratamiento a más largo plazo. La fisioterapia puede ser una opción para tratar tanto lesiones como otras afecciones. Siga leyendo para saber más sobre los beneficios de la fisioterapia infantil, las afecciones que puede tratar y las precauciones de seguridad para mantener a su hijo sano y feliz.
¿Qué es la fisioterapia pediátrica?
La fisioterapia pediátrica es eficaz en el tratamiento de afecciones perinatales, afecciones diagnosticadas en la primera infancia y lesiones sufridas a lo largo de la infancia y la transición a la atención de adultos. La fisioterapia pediátrica mejora la función física y la calidad de vida. Sus beneficios a largo plazo son significativos e incluyen la reducción de la discapacidad y de la necesidad de cirugía u otras intervenciones invasivas más costosas, lo que se traduce en una menor carga en el uso futuro de los servicios sanitarios.
Los servicios de fisioterapia pediátrica tratan una amplia variedad de afecciones agudas y crónicas en diferentes entornos, desde hospitales de cuidados intensivos hasta la comunidad y las escuelas. Los fisioterapeutas pediátricos evalúan, diagnostican y tratan afecciones neurológicas, del desarrollo, cardiorrespiratorias y ortopédicas en niños de hasta 18 años, centrándose en mejorar la función y aumentar la independencia. La fisioterapia tiene un impacto positivo y significativo en la función pulmonar, el control motor, la fuerza muscular y la resistencia física en pacientes pediátricos con afecciones crónicas como parálisis cerebral, fibrosis quística y artritis idiopática juvenil.
¿Para qué sirve la fisioterapia pediátrica?
El tratamiento puede ser a corto plazo o continuo, dependiendo del problema que se esté tratando. Si se trata de una lesión menor, unas pocas sesiones de fisioterapia pueden ayudar al paciente a recuperarse por completo, mientras que los problemas causados por una enfermedad o una lesión debilitante importante pueden necesitar tratamiento y control a largo plazo.
La fisioterapia pediátrica es similar a la fisioterapia con la única diferencia de la edad del paciente; la fisioterapia pediátrica está diseñada específicamente para atender las necesidades de:
- Lactantes
- Niños
- Adolescentes
Existen varias clases de afecciones en las que se centra la fisioterapia infantil. Se trata de enfermedades congénitas, del desarrollo, neuromusculares, ortopédicas, esqueléticas y adquiridas. Más concretamente, quienes deben someterse a fisioterapia pediátrica son los niños y adolescentes que padecen o se ven afectados por cualquier afección discapacitante relacionada o causada por:
- Defectos congénitos
- Enfermedades relacionadas con el cáncer
- Parálisis cerebral
- Problemas crónicos de salud, como artritis
- Dolor crónico o recurrente que afecta a la espalda o el cuello
- Retrasos en el desarrollo físico
- Problemas genéticos
- Traumatismo craneoencefálico
- Cardiopatías
- Lesiones, normalmente debidas a actividades deportivas, que pueden incluir esguinces, torceduras, fracturas o fracturas óseas.
- Deficiencia de las extremidades
- Problemas pulmonares
- Enfermedad muscular
- Discapacidad o lesión ortopédica
- Traumatismo
¿Cómo se realiza la fisioterapia pediátrica?
Los fisioterapeutas pediátricos ayudan a los niños a alcanzar su desarrollo físico óptimo. Tienen conocimientos especializados sobre el movimiento, el desarrollo y las afecciones que pueden afectar al bebé y al niño en crecimiento. El tratamiento puede incluir masaje de tejidos blandos, movilización, estiramientos, ejercicios terapéuticos específicos y educación postural. Dado que los niños no son adultos pequeños, estos terapeutas animan a los niños a moverse al máximo de sus capacidades mediante el juego y la diversión e instrucción apropiadas para su edad. El fisioterapeuta trabajará inevitablemente en el contexto del niño y su familia y tendrá la oportunidad de trabajar con el niño en una serie de situaciones que se extienden al hogar, grupos preescolares, educación y actividades de ocio.
Debido a las complejas necesidades del niño y su familia, el fisioterapeuta puede trabajar con muchas otras disciplinas, como médicos, enfermeros, trabajadores sociales, personal educativo y asistencial, equipos psicológicos y psiquiátricos, así como logopedas y terapeutas ocupacionales. El fisioterapeuta que trabaja en estos equipos debe ser capaz de comunicar sus observaciones, evaluaciones y planes de tratamiento al niño, a sus padres y a los demás miembros del equipo. Para trabajar de forma eficaz y eficiente, el fisioterapeuta pediátrico debe, además de sus habilidades fisioterapéuticas, tener un claro conocimiento del proceso de desarrollo de la infancia, de los patrones reflejos primitivos y de las enfermedades y discapacidades pediátricas.
Especialistas en fisioterapia reumatológica
Beneficios de la fisioterapia pediátrica
El objetivo de la fisioterapia puede variar en función de para qué se utilice. Algunos beneficios comunes son:
- Reducir el dolor
- Mejorar la movilidad
- Prevenir discapacidades
- Evitar cirugías
- Prevenir futuras lesiones
- Rehabilitación de lesiones actuales
- Tratamiento de enfermedades crónicas
Por qué recurrir a la fisioterapia pediátrica
El proceso de fisioterapia consiste en ayudar a los más pequeños a moverse o a utilizar su cuerpo de forma más saludable. El modo exacto en que la fisioterapia puede ayudarles depende de su situación específica.
Por ejemplo, la fisioterapia es una parte habitual del plan de tratamiento de la parálisis cerebral, una afección neurológica que puede dificultar a los niños el control de su cuerpo. En este caso, es probable que el fisioterapeuta ayude al niño a aprender a trabajar con su cuerpo y a desarrollar un mayor control con el tiempo. Por otra parte, las lesiones deportivas también pueden beneficiarse de la fisioterapia.
Síntomas que indican que necesitas fisioterapia pediátrica
Los tipos de trastornos o dificultades del movimiento con los que pueden ayudar los fisioterapeutas pediátricos varían mucho, pero pueden incluir:
- Bebés y niños que tardan más en alcanzar sus hitos motores, por ejemplo: bebés que tardan en aprender a sentarse, gatear o andar.
- Bebés y niños que utilizan patrones inusuales para moverse, como sentarse, arrastrar las nalgas o andar de puntillas.
- Niños que tienen dificultades con las habilidades motrices, como el salto o la habilidad con el balón.
- Niños pequeños y bebés torpes o descoordinados.
- Niños que han sufrido una lesión o traumatismo y necesitan rehabilitación para recuperar su mejor forma física.
Especialistas en fisioterapia deportiva
Indicaciones de la fisioterapia pediátrica
Los tipos de trastornos del movimiento o dificultades motrices con los que pueden ayudar los fisioterapeutas pediátricos varían mucho, pero pueden incluir:
- Bebés y niños que tardan más en alcanzar sus hitos motrices.
- Bebés y niños que utilizan patrones inusuales para moverse, como sentarse, arrastrar las nalgas o andar de puntillas.
- Niños con dificultades motrices.
- Niños con discapacidades como parálisis cerebral, síndrome de Down, autismo, lesiones cerebrales, distrofias musculares u otros síndromes o afecciones congénitas.
- Bebés y niños con afecciones óseas, articulares o musculares, como plagiocefalia (cabeza aplanada), pie zambo, pie plano, articulaciones demasiado flexibles o dislocadas, o afecciones congénitas..
- Niños con afecciones reumatológicas y dolorosas como artritis, miositis o dolor crónico.
- Niños que han sufrido una lesión o traumatismo y necesitan rehabilitación para recuperar su mejor forma física.
- Niños con rumiación.
- Niños con afecciones respiratorias crónicas como fibrosis quística, bronquiectasias o discinesia ciliar primaria.
Contradicciones de la fisioterapia pediátrica
La fisioterapia en niños está contraindicada en los siguientes casos:
- Con sobrecarga mental o física del niño;
- Menos de 30-40 minutos antes de comer y 1 hora después de comer;
- Durante o inmediatamente después de una enfermedad infecciosa aguda
- En la zona de crecimiento óseo
- Con tendencia a hemorragias
- Con peso corporal reducido
- En zonas con violación de la integridad de la piel
- En presencia de enfermedades purulento-inflamatorias, con peligro de diseminación de la enfermedad;
- Con disminución de las capacidades adaptativas corporales;
- Con intolerancia a un factor físico.
¿Cuánto tiempo de tratamiento dura la fisioterapia pediátrica?
Depende de cada niño, puesto que las afecciones que pueden padecer no son las mismas y cada cuerpo reacciona diferente ante los distintos tratamientos. Lo que sí que podemos avanzarte es que, usualmente, se necesitarán varias sesiones.
¿Cuánto tarda en hacer efecto la fisioterapia pediátrica?
Aunque para contribuir a mejorar la calidad de vida de los niños se necesitan varias sesiones, desde las primeras ya se pueden empezar a experimentar ciertos cambios. Como hemos indicado, la rapidez o duración de los mismos variarán en función de cada paciente.
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